lunes, 4 de abril de 2016

LOS BUSES AMARILLOS.

En la ciudad de Tegucigalpa, los buses amarillos están siendo sacados de circulación.
En la actualidad, el municipio de Victoria, en el departamento de Yoro sus habitantes se desplazan a las grandes ciudades y otros puntos en los populares buses amarillos.

Curiosamente en este municipio no han han aparecido los "buses rapiditos" un servicio ejecutivo que si funciona en las ciudades hondureñas y otras comunidades que trasladan a los usuarios por un precio mas alto que el de los buses amarillos.
Estas unidades incian en este municipio de Victoria Yoro Honduras su recorrido faltando 15 minutos para las siete de la mañana soñando el pito, desde la terminal ubicada en las inmediaciones del paruqe Lempira, recorren la plaza principal de punta a punta buscando clientes que no lograron llegar a la terminal y luego salen rumbo a la capital de Honduras Tegucigalpa.
Mientras tanto en la capítal tiene su terminal en el mercado Zonal Belen y los mismos salen hacia el municipio de Victoria, Yoro, generalmente salen vacíos de la capital y en su recorrido van subiendo usuarios que van con destino a la ciudad de Talanga, Minas de Oro y San José del departamento de Comayagua.
A esto hay que agregar que durante todo el trayecto de Minas de Oro-Victoria, abordan el bus de las aldeas de Montesitos, El Tablón, Santa Cruz, Las Delicias y otros caseríos. 
Uno de los buses amarillos que cubre la ruta de Tegucigalpa-Victoria, Yoro, Victoria, Yoro-Tegucigalpa.
Durante la pasada Semana Santa (ultima semana del mes de marzo) las autoridades del transporte realizaron una supervicion de los buses amarillos y una de las normas era que no fueran usuarios de pie y que cada uno fuese en su asiento.
Los pasajeros viajaron cómodamente porque venían bien sentaditos y disfrutando de las bondades de viajar sin aglomeraciones en los populares buses amarillos.
Quienes viajan de Victoria, Yoro a la ciudad de Tegucigalpa, en otras temporadas en que las autoridades de Transito no ponen en vigencia las normas establecidas "van nerviosos cuando pasan por las hondonadas ubicadas entre Montecitos-desvío de San José y El Portillo", porque los buses amarillos van repletos de pasajeros.
El nerviosimo de los usuarios de estas unidades aumenta cuando pasan por la cuesta llamada cuesta de La Chácara, donde la calle es angosta y a un lado hay abismos de miles de metros, solo la misrecordia de Dios ha hecho que no se hayan producido accidentes, y la habilidad de los conductores.
Las autoridades de Transporte de Honduras, deberían durante todo el año ejecutar las normas que regulan el transporte y así los usuarios viajaran con menos tensión, porque irán todos sentados y disfrutaran de sus viajes.

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